Este fin de semana comienza la jornada 7 de LaLiga que estará marcada por el derbi madrileño entre Atlético de Madrid y Real Madrid que se disputa el sábado a las 16:15 en el Ryad Air Metropolitano.
Una temporada más, rojiblancos y merengues se verán las caras en una nueva temporada, donde Simeone se reencontrará con el entrenador vasco Xabi Alonso, pero esta vez como vecino, y es que el de Tolosa debuta en un derbi que se antoja igualado, caliente y exigente.
Y aunque ambos equipos vienen en un estado de forma muy diferente, los blancos viniendo de ganar todos los partidos que han disputado esta temporada (7) y los colchoneros de haber ganado tan solo dos y haber generado más dudas que certezas, no podemos descartar una machada del Atlético de Madrid, porque no sería la primera vez que un ‘a priori’ inferior Atlético de Madrid humilla a un ‘potente’ Real Madrid y no hay que echar mucho la vista atrás, Diego Pablo Simeone, ya dirigía al club rojiblanco, y José Giménez, Koke, Griezmann o Jan Oblak, ya eran parte de la plantilla rojiblanca, aunque este último con un rol secundario, puesto quien defendía la portería era Miguel Ángel Moyà.
Nos retomamos a 7 de febrero de 2015, cuando Atlético Madrid y Real Madrid se enfrentaban en la jornada 22 de Liga. El Atleti partía como 3º con 47 puntos y se encontraba a 7 puntos del Real Madrid que era líder con 54. El Atleti ya había ganado el partido de ida en el Santiago Bernabéu (1-2), por lo que repetir hazaña parecía muy difícil y más cuando el Real Madrid había recuperado a su máxima estrella, Cristiano Ronaldo, que volvía tras una sanción de dos partidos por una agresión que realizó en un enfrentamiento ante el Córdoba.
La alineación por parte del Atlético Madrid era: Miguel Ángel Moyà en portería. Juanfran, João Miranda, Diego Godín y Guilherme Siqueira en defensa. Un centro del campo formado por Gabi, Tiago, Arda Turan y Koke. Y la zona de ataque para Mario Mandžukić y Antoine Griezmann.
Desde el minuto 1 el Real Madrid parecía dormido, no estaba mostrando el nivel acostumbrado, y eso, los de Simeone, lo aprovecharon.
Al minuto 14 se adelantaba el Atleti en el marcador, con un gol de Tiago en el minuto 14′. El balón le pasó a Íker Casillas (guardameta del Real Madrid) por debajo del brazo.
El segundo gol no tardó en llegar, al minuto 18, un Saúl Ñíguez de tan solo 19 años batía la portería merengue con una chilena que dejaba una imagen de portada.
Hubo que esperar al segundo tiempo para ver más goles. En el minuto 66, Antoine Griezmann marcó el 3-0 que dejaba atónita a la afición del Madrid.
Y a las puertas de acabar el partido, Fernando Torres, recién incorporado en el campo, asistía al delantero croata Mario Mandžukić para dejar en el marcador un histórico 4-0 a favor del equipo rojiblanco.
La derrota no alteró la clasificación de LaLiga en las posiciones de arriba, el Atlético seguía siendo tercero y el Real Madrid se mantenía líder, pero ya había tan solo 4 puntos de distancia entre los madrileños y el Barça se encontraba a un mísero punto del liderato.
Ese día, la afición rojiblanca se fue a dormir con una sonrisa de oreja a oreja, y esperemos que ese resultado pueda repetirse esta misma jornada.