El Real Madrid salió humillado del Metropolitano, con una manita (5-2) en el derbi, y la hinchada madridista presente en la grada visitante descargó su frustración insultando a Diego Pablo Simeone.
La afición del Atlético de Madrid abandonó el estadio antes del pitido final, mientras que en la grada visitante apenas quedaron unos pocos madridistas, ya que la mayoría se marchó muchos minutos antes.
Fue entonces cuando los seguidores blancos, casi inadvertidos durante el partido, aprovecharon la ausencia de la hinchada local para insultar al técnico rojiblanco mientras este atendía a DAZN.
Simeone respondió a su manera: levantando la mano abierta y saludándoles con una irónica “manita”.