Despedidas también en la cantera rojiblanca
Los jugadores del primer equipo del Atlético de Madrid no son los únicos que este 30 de junio se despiden del club rojiblanco; en la cantera también hay varias bajas importantes.
Uno de los casos más destacados es el de Borja Garcés, quien estaba llamado a ser uno de los grandes referentes de la cantera colchonera, uno de los talentos más prometedores de la académia atlética. Sin embargo, tras diez años en el club, Borja se marcha definitivamente.
Una carrera prometedora interrumpida por la lesión
Muchos le veían como un jugador con potencial para suceder a Fernando Torres como delantero formado en la cantera. Pero, claro, eso es un gran desafío: el ‘Niño’ no solo es uno de los mejores delanteros en la historia del Atlético, sino también una de las figuras más destacadas del fútbol europeo.

En el caso de Garcés, una inoportuna lesión en la rodilla frenó una progresión que ya estaba marcada por numerosas cesiones, algunas de ellas sin la continuidad deseada.
Momentos para recordar y cesiones variadas
Quedará en su memoria aquel partido a comienzos de la temporada 18/19, cuando debutó con el primer equipo y anotó un gol decisivo frente al Eibar para rescatar un punto. “Lo saqué porque es un chico con gol”, explicaba entonces Simeone.
Después llegaron cesiones en Fuenlabrada, Leganés, Tenerife y Elche, con diferentes grados de éxito; hasta que en la segunda parte de la temporada pasada regresó al Atlético B, recuperándose también de problemas físicos, aunque sin demasiado protagonismo bajo las órdenes de Fernando Torres.
Un mensaje emotivo de despedida
Borja Garcés se despidió del Atlético a través de sus redes sociales, con palabras de agradecimiento y la esperanza de recuperar su mejor nivel y encontrar regularidad en su próximo club.
“Hoy no es un día cualquiera. Me despido del equipo de mi vida, el que me ha dado todo. Tras diez años en este club, cierro una etapa que ha marcado mi historia para siempre. Llegué siendo un niño con mucha ilusión y me voy con orgullo de haber cumplido un sueño: debutar en Primera División y marcar con la camiseta del Atlético de Madrid. Ese momento jamás lo olvidaré”, escribió el melillense.
“Solo puedo dar las gracias: a los entrenadores que confiaron en mí, a mis compañeros por cada instante, a los cuerpos técnicos, al personal del club y a esa afición que siempre apoyó, en las buenas y en las malas. Gracias Atleti por abrirme las puertas y hacerme crecer como jugador y persona. Llevaré estos colores siempre en mi corazón”, concluyó.
“Se cierra un capítulo, pero la historia continúa. Con la misma pasión, voy a por lo que viene”.