Por Thanos Nikitaras 
Conor Gallagher fue uno de los fichajes del verano que no han rendido como muchos aficionados esperaban.
El inglés llegó al Atlético de Madrid en una situación peculiar, tras todo lo ocurrido con João Félix y la decisión del club de no fichar a Javi Guerra. Aun así, todo apuntaba a que Gallagher podría hacerse con un puesto como titular. Internacional con Inglaterra, capitán en el Chelsea y con un estilo que gusta mucho a Simeone, su perfil generaba ilusión.
Sus primeros partidos fueron prometedores: fue titular en varios encuentros y llegó incluso a marcar goles. Sin embargo, cuando el Atlético empezó a ganar con regularidad y a mostrar una versión más sólida, Gallagher perdió protagonismo. El ‘Cholo’ buscó fórmulas para seguir dándole minutos, y una de ellas fue ubicarlo en la banda izquierda. Un experimento que funcionó en parte, especialmente ante el bajo rendimiento de Samuel Lino, pero el inglés nunca llegó a destacar del todo.
No es casual que una de las posiciones que el club busca reforzar con urgencia sea precisamente la banda izquierda. Por ello, muchos aficionados esperaban que Álex Baena pudiera llegar antes del Mundial de Clubes para cubrir esa necesidad.
Todo apunta a que, si no hay sorpresas, Gallagher no será titular la próxima temporada, lo que abre la puerta a una posible salida si llega una buena oferta. Se trata de un jugador con mercado y con un salario alto, factores que pueden pesar en la planificación del club.
Aun así, el propio Gallagher se ha mostrado feliz en Madrid. Según ha informado el periodista Rubén Uría, el jugador ha hablado con la dirección del club y ha expresado su deseo de quedarse y seguir mejorando su rendimiento. Incluso, su pareja estaría buscando casa en la capital.
¿Lo venderán si llega una oferta importante? Nadie lo sabe. De momento, en el Atlético nadie contempla una salida inmediata, aunque el futuro del inglés sigue rodeado de incertidumbre.
Javier Astudillo