En el minuto 93, Antoine Griezmann sentenció la victoria del Atlético con el 5-2, poniendo fin a un partido dominado de principio a fin por los rojiblancos. El gol llegó en los últimos instantes y confirmó el triunfo definitivo del equipo.
Más allá del resultado, el tanto tiene un valor especial: rompe la racha de sequía goleadora de Griezmann, devolviéndole confianza y recordando su capacidad para decidir partidos. La afición celebró con entusiasmo, mientras Antoine volvió a mostrar por qué sigue siendo un jugador clave para el Atlético.