Por Thanos Nikitaras 
El Atlético de Madrid se juega una final ante el Botafogo este lunes a las 21:00, en la última jornada de la fase de grupos del Mundial de Clubes.
Los rojiblancos ya conocen al árbitro designado para el partido, que, aunque no deja ni buenos ni malos recuerdos al club, sí genera cierta inquietud en algunos jugadores de la plantilla. Hablamos del mexicano César Ramos. Tiene 41 años y es árbitro internacional desde 2014. En este Mundial de Clubes debutó dirigiendo el Boca Juniors-Benfica. Sus asistentes serán sus compatriotas Alberto Morín y Marcos Bisquerra, mientras que el cuarto árbitro será el uruguayo Gustavo Tejera.
César Ramos es un colegiado conocido por sacar tarjetas con facilidad. En el duelo entre Boca y Benfica expulsó a Ánder Herrera, Figal y Belotti. José María Giménez conoce de primera mano su arbitraje: fue el encargado de dirigir la semifinal de la Copa América disputada en Estados Unidos, donde Uruguay cayó ante Colombia en un partido que terminó con duras sanciones para varios jugadores charrúas, incluido el central del Atleti. Aquel encuentro terminó en una pelea generalizada en el campo que continuó con agresiones entre jugadores uruguayos e hinchas colombianos.
Pese a todo, Ramos es un árbitro experimentado, con más de 250 partidos en la liga mexicana. Promedia cinco amarillas por partido y 0,5 rojas.