La mala racha de los argentinos del Atleti

El Atlético de Madrid tiene por delante una misión muy difícil si quiere clasificarse para los octavos del Mundial de Clubes: debe ganar al Botafogo por al menos tres goles de diferencia, o esperar un tropiezo del PSG (y también vencer al equipo brasileño).

Para que esto ocurra, el Atleti necesita que sus principales figuras estén en un gran nivel. Y si hablamos de dos jugadores clave en el esquema de Simeone, no podemos dejar fuera a Julián Álvarez y Rodrigo De Paul.

Ambos aún no han brillado en el Mundial de Clubes. Julián no ha marcado en ninguno de los dos partidos (lo hizo ante el PSG, pero su gol fue anulado por el árbitro) y suma ya tres encuentros sin ver puerta, su peor racha desde febrero. El Atleti necesita marcar muchos goles, y Julián debe reencontrarse con el gol. Parece haber llegado a Estados Unidos con las fuerzas justas, algo comprensible para un futbolista que acumula 56 partidos esta temporada con el club, y más de 4.000 minutos si se suman los de la selección argentina. Es el máximo goleador del equipo con 29 tantos, y en un partido de vida o muerte, debe volver a demostrar que es el líder ofensivo del conjunto rojiblanco.

De Paul, por su parte, no atraviesa su mejor momento como colchonero. Fue uno de los pilares del equipo hasta marzo, cuando el Atleti vivía una gran racha, pero su nivel cayó con los tropiezos del equipo. En el debut ante el PSG fue superado por las medias puntas rivales y contra Seattle Sounders estuvo perdido, siendo uno de los más flojos en el campo. Llegó tocado desde Argentina y hubo dudas sobre su participación ante el equipo francés, lo que podría explicar su bajo rendimiento. Al igual que Julián, parece haber llegado a Estados Unidos con la gasolina justa, o incluso en un nivel más bajo. El Atleti ha sufrido la irregularidad de De Paul, que alterna partidos muy flojos con otros excelentes. En una final, en un Argentina-Brasil, se espera que saque lo mejor de sí. Solo así el conjunto de Simeone podrá soñar con la clasificación.