Por Thanos Nikitaras 
El Atlético de Madrid necesita tres goles para clasificarse a los cuartos de final del Mundial de Clubes. Julián Álvarez y Alexander Sorloth necesitan tres goles para igualar a la dupla más goleadora en la historia del Atleti.
El Atleti y los dos jugadores tienen el mismo deseo: marcar tres goles. Tres goles para la historia, tres goles para que el Atlético de Madrid siga en el Mundial. Los rojiblancos, si quieren superar al Botafogo, necesitan que sus dos delanteros titulares —todo apunta a que Sorloth será titular— tengan un buen día. «Necesitamos marcar muchos goles. Es un buen equipo, nosotros tenemos que jugar al ataque, con mentalidad ofensiva, estar en su área, poner pases allí, y eso me gusta», dijo antes del partido el noruego.
«Lo que necesitamos es hacer goles. Ser contundentes, efectivos, y las que tengamos, meterlas. Ni siquiera te diría que tenemos que hacer un partido perfecto. Solo que no nos hagan goles y nosotros sí los hagamos para lograr el objetivo», decía el argentino.
La mentalidad es clara: meter muchos goles.
Los datos de la dupla
Julián Álvarez y Alexander Sorloth llegaron al Atleti el verano pasado, cuando el club decidió renovar por completo su delantera. Morata y Depay habían demostrado que no podían ser los delanteros titulares en un Atlético que respira por títulos, y desde el Metropolitano apostaron por el argentino, que quería salir de Manchester, y por el segundo máximo goleador de LaLiga. Los números de ambos con la rojiblanca son impresionantes. Julián ha marcado 29 goles, Sorloth 24; juntos suman 53 dianas, solo tres menos que la mejor dupla goleadora de la historia del Atleti: la formada por Forlán y Agüero en la temporada 2008-09, cuando anotaron 56 goles. Una pareja histórica que fue clave en el primer título tras 14 años: la Europa League de 2010.
Falcao
A punto de igualarlos estuvo también Radamel Falcao. Con Adrián, en su primera temporada, alcanzaron los 55 goles, y con Diego Costa, en su segunda, los 54. Cada año que el Atleti tuvo una dupla goleadora, terminó tocando metal. En el primer año del colombiano, la Europa League; en el segundo, la Copa del Rey en el Bernabéu.
Julián y Sorloth tendrán más oportunidades en el futuro para superar a esas leyendas, pero nadie en el Atleti —ni ellos— quiere pensar en el futuro. Lo único que importa es ahora.
Ruth Romero