El Atlético de Madrid sufrió una dura derrota ante el Espanyol, en la que Antoine Griezmann fue uno de los protagonistas, pero por motivos negativos. El delantero apenas tocó la pelota cuatro veces, recordando al Griezmann de la temporada pasada, muy lejos de aquel jugador determinante que marcó diferencias.

Celebración del gol frente al RCD Espanyol/ Fuente: Club Atlético de Madrid

Pese a haber tenido actuaciones destacadas en los primeros partidos de la temporada, incluidos dos golazos ante Rayo Vallecano y Newcastle, en este encuentro no logró brillar.

La diferencia entre Griezmann y otros jugadores como Baena fue evidente, Además, Raspadori entró antes que Sorloth, quien la temporada pasada marcó 24 goles, la entrada de Raspadori, recién llegado al Atlético, no aportó soluciones. Aunque mostró ganas y recorrido, se vio desorientado en el campo, lo que generó críticas sobre la planificación de Simeone y la necesidad de que los fichajes se adapten a los sistemas del equipo.

El debate se centra ahora en el rendimiento de Griezmann y la necesidad de reforzar la delantera. Ahora que se han roto las negociaciones entre Inter y Atalanta por Lukman, podría abrir una oportunidad para el Atlético. Lukman es un jugador que aportaría mucho nivel en las bandas y puede actuar como segunda punta, solucionando problemas que se han visto en el ataque, especialmente tras las salidas de Julián, Baena y Almada.

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