Por Jaime Mourelle Die 
Rodrigo De Paul aterrizó en el Atlético de Madrid en julio de 2021 tras un brillante paso por Udinese y su participación estelar en la Copa América con Argentina. Durante sus casi tres temporadas en el Metropolitano disputó 187 partidos, repartió 14 goles y 26 asistencias, pero su paso también estuvo salpicado de polémicas que afectaron su vínculo con la afición.
Un inicio complicado y diversidad de polémicas
Tras llegar en 2021 desde Udinese, De Paul fue recibido con esperanza, pero pocos meses más tarde comenzó el desgaste. En diciembre de 2022 fue abucheado durante el homenaje a jugadores campeones del mundo, un síntoma de la distancia con parte de la afición. Además, fue acusado junto a compañeros de generar tensiones y partidos divididos en el vestuario, especialmente tras su afinidad con Lionel Messi. A nivel extradeportivo, fue duramente criticado por pedir permiso para ausentarse con supuesto motivo familiar, solo para luego ser visto en una gala en Miami junto a su pareja, la artista Tini Stoessel.
Otro de los aspectos que la afición suele achacar al centrocampista argentino es la diferencia de nivel que muestra cuando juega con su selección y cuando juega con el Atlético de Madrid, siendo tan abismal que, mientras que en el conjunto nacional es un titular indiscutible, en el club rojiblanco ha tenido muchas idas y venidas del once titular con el Cholo Simeone.
Bajones de rendimiento: pocas apariciones y poco impacto
En la temporada 2023-24, De Paul disputó 48 partidos, 3 goles y 6 asistencias, con 3.211 minutos jugados Pese a esos números, en muchos momentos fue relegado al banquillo y criticado por no ofrecer regularidad. Su rendimiento cayó notablemente tras eliminarse en Champions, y en partidos clave mostró falta de intensidad física.
En abril de 2024, un comentario suyo generó furor: calificó la temporada como «muy buena» tras otra derrota, lo que desató indignación entre aficionados que veían el curso como un fracaso colectivo. El distanciamiento también se vio reflejado en críticas a su actitud en partidos, donde se le señaló por falta de entrega o tensión innecesaria ante los árbitros.
La mejor versión llegó al final
Todo cambió en la campaña 2024‑25. De Paul disputó 53 partidos en todas las competiciones con 3 goles y 10 asistencias, acumulando más de 3.485 minutos en campo. Esta temporada firmó sus mejores registros como rojiblanco: lideró en pases clave (1,05 por partido), pases al área y asistencias, siendo el mayor asistente del equipo en LaLiga con siete pases de gol en 32 encuentros. Sin embargo, parece ser que el acuerdo con el Inter de Miami ya se había cerrado previamente a la disputa del Mundial de Clubes, donde el nivel de Rodrigo de Paul fue mediocre.
En definitiva, De Paul cerró su ciclo en el Atlético con dos lados muy distintos: entre altibajos públicos, silencios incómodos y reencuentro con su mejor versión sobre el campo. La cesión al Inter Miami representará el capítulo final de su disputa con la afición… y una puerta abierta a reconciliarse con su carrera.
Thanos Nikitaras 
Javier Astudillo